Un encuentro interesante con Nang Kwak

Los mercados nocturnos de Chiang Mai tienen una magia particular. Entre luces, olores y sonidos, cada puesto es una pequeña ventana a la cultura local y hace unos días, mientras caminábamos entre los stands, uno en particular llamó mi atención.

Un hombre mayor exhibía telas con intrincados diseños de deidades y símbolos, como pequeños pósteres de tela llenos de significado. Me acerqué, intrigada, y él, con una sonrisa cálida, comenzó a explicarme a una gran velocidad, señalando cada pieza con dedicación intentando explicarme los complicados conceptos con simples palabras como “business” o “friendship”.

Aprendí que estas telas se llaman Yantra, símbolos sagrados que, según la tradición tailandesa, conectan a quien los posee con energías cósmicas y deidades protectoras. Además, están ligados a determinados templos en particular, algunos con sellos, otros no, pero todos - según él y yo le creo todo - originales.

Una pieza resonó conmigo. Una tela amarilla con la imagen de Nang Kwak, la diosa tailandesa de la prosperidad y la buena fortuna. Se dice que ella atrae clientes y éxito en los negocios, y es común verla en tiendas y mercados, siempre con su mano como diciendo "acérquese caserita".

En este momento de mi vida, mientras impulso mis proyectos de diseño y Nacho busca nuevas oportunidades profesionales, sentí que esta elección no era casualidad y ahora, Nang Kwak ocupa un lugar especial en nuestro pequeño altar. A diario la saludamos, a veces le traemos flores. Es ahora una parte de esta nueva rutina tan poco rutinaria que es viajar.

Creo que Nang Kwak nos eligió tanto como nosotros a ella.